lunes, 25 de junio de 2012

En Mayo Teatral

Un importante estímulo para los creadores de Cuatro Menos y su apasionado público resultó el hecho de que el espectáculo fuera seleccionado para participar en el Mayo Teatral 2012. Esta jornada -que organiza con eficacia y con intencionalidad, sentido de la jerarquía Casa de las Américas- estuvo dedicada este año a la relación entre el Teatro y la Sociedad. Un texto como el de Amado del Pino y un montaje tan social y cívico de Alejandro Palomino con su Vital Teatro, funcionaron muy bien entre propuestas -también de vocación social- procedentes de Costa Rica, Argentina, Brasil y otras naciones latinoamericanas.
Las funciones durante Mayo Teatral -los días 4 , 5 y 6 de este lluvioso mes en La Habana- volvieron a repletar la sala Tito Junco del Centro Cultural Brecht. El autor estuvo presente en la función del domingo 6. A pesar de -por necesidades de la Muestra- cambiarse ese día el tradicional horario de las cinco de la tarde para la noche, los espectadores respondieron con similar masividad a la temporada septiembre-octubre de 2011, en la que varios miles de habaneros aplaudieron y sobre todo reflexionaron a partir de Cuatro Menos.

domingo, 1 de abril de 2012

En La Corsetería y algo más


Dos hermosas noches de teatro cubano disfrutamos en La Corsetería, sede del Nuevo Teatro Fronterizo que encabeza su fundador, el gran dramaturgo español José Sanchis Sinisterra.  Gracias al esfuerzo, el buen gusto y el talento de los jóvenes del proyecto Mano de Obra, se expusieron –en una representación por momentos más cerca de la puesta en escena que de la lectura dramatizada- fragmentos de varias obras esenciales de la dramaturgia cubana de los últimos años: Huevos, de Ulises Rodríguez Febles, Ignacio y María, de Nara Mansur, Talco, de Abel González Melo y Cuatro Menos, de Amado del Pino.
La escena final de Cuatro Menos –en la que sobresalió la interpretación de Silvia Jiménez, coordinadora y alma de estas dos jornadas- sirvió de pretexto para interesantes reflexiones sobre la vida teatral cubana, y sus vínculos con la sociedad. Se destacó además que un director de tanta importancia para el teatro en La Habana de hoy como Carlos Celdrán se hubiese decidido a incursionar en la dramaturgia cubana con texto de González Melo – Chamaco y después Talco- y con Reino Dividido, otro importante título de Amado del Pino.
Sobre Cuatro Menos y la repercusión en el público de los temas más críticos se comentó ampliamente en La Corsetería. Vale la pena recordar que este texto ganó el Premio Arniches en 2008, que forma parte de una antología que saldrá a la luz próximamente bajo el sello de Letras Cubanas y para 2013 Ediciones Unión presentará las tres obras de Amado del Pino que ha estrenado Vital Teatro: el monólogo En falso; Triángulo y la muy exitosa Cuatro Menos. El anterior acontecimiento de público a partir de las obras de nuestro autor – Penumbra en el noveno cuarto- ha sido llevada al lenguaje audiovisual por Charlie Medina y podrá verse en la Televisión Cubana y otros circuitos.

lunes, 27 de febrero de 2012

Ideas y afectos en la Cuba de hoy


Desde su estreno- el 2 de septiembre de 2011 en el Centro Cultural Brecht- Cuatro menos se ha convertido en todo un acontecimiento de público. Miles de espectadores abarrotaron la sala Tito Junco en la céntrica calle Línea de La Habana.
Además del número de entusiastas asistentes de todas las edades y grupos sociales, llama la atención la respuesta del público en las ocho semanas de funciones y su interacción con el espectáculo. El texto de Amado del Pino- llevado a las tablas por Alejandro Palomino con Vital Teatro- plantea asuntos de palpitante actualidad. Su autor ha dicho en varias entrevistas que el diálogo entre su obra y la realidad no dejó de crecer desde que el texto fuera escrito y recibiera en España el muy prestigioso Premio Arniches en 2008.
En esta tercera ocasión en que Palomino y Vital Teatro se adentran en el mundo de los personajes de Del Pino, destaca el abanico de grupos generacionales que ocupan la atención del espectáculo: desde el protagonista,  un sociólogo de 50 años que investiga sobre el crecimiento de los índices de envejecimiento de la población cubana, hasta su hija menor que, con 18 años, se dispone a emigrar. 
Cuatro menos junta lo cívico con lo afectivo; el desenfado, la gracia del cubano de a pie con reflexiones sobre el destino de la sociedad. Pone sobre las tablas verdades y certezas; polémicas y dudas que suelen debatirse en el ámbito familiar u otros espacios, pero que resultan insólitas sobre un escenario habanero. Todo ello con un montaje que pone en el centro a los intérpretes y establece una notable complicidad entre un elenco- repleto de figuras muy apreciados por su labor en el teatro, la televisión y el cine- y su entregado, cómplice público.
En el mes de junio, Cuatro menos regresa  a la cartelera. Los espectadores no han dejado de reclamarla desde la última e inolvidable función de la primera temporada en que se repletaron las escaleras y hasta el suelo de la sala teatral. Aquellos aplausos merecen este regreso a escena de sus protagonistas.